“Es hora de dejar espacio a Sugoi Uriarte y David Ramírez”
• Óscar Peñas, toda una referencia del yudo nacional, se retira después de más de 16 años al más alto nivel. Deja tras de sí un formidable palmarés; sólo se le ha resistido la medalla olímpica.
MARCA 03/06/09 - 20:24Despuntaba en la alta competición de yudo allá por el año 93. Se subía al tercer escalón de un podio nacional con tan sólo 20 años. Desde entonces hasta hoy este madrileño ha cosechado diez medallas en nacionales, lleva 25 podios en Copas del Mundo (9 de oro, 6 de plata y 10 de bronce), fue campeón de Europa a los 24 años y después ha sido bronce en dos ocasiones más. Pisaba el tatami olímpico en tres ocasiones y en los Juegos de Atenas lograba un meritorio quinto puesto. En declaraciones exclusivas a MARCA.com, Oscar Peñas ha anunciado su retirada de la alta competición. Esa es la “mala” noticia, la buena es que no se desvincula del mundo del yudo, y es que a sus 34 años sigue siendo un apasionado de este deporte.
“El yudo es uno de los deportes más completos, tanto para la mente como para el físico y además educa, posee unos valores que otros deportes no tienen, aquí no caben algunas maneras que se ven en futbol por ejemplo, es mi deporte, estoy muy orgulloso. El balance que hago de estos años es excelente, el yudo me ha dado muchísimas cosas y muy positivas, he disfrutado de la alta competición y ahora toca verlo desde el otro lado, la verdad que es que me gusta tanto que no he querido desvincularme del todo”, confiesa el yudoca.
“Me gustaría llevar al yudo de Madrid al sitio que le corresponde, al sitio que merece ocupar dentro del panorama nacional e internacional”, añadía.
Óscar Peñas actualmente es coordinador en la Federación Madrileña de Yudo; trabaja con las categorías base, es una de las buenas cosas que hizo la madrileña, incorporar en su estructura a gente con savia nueva como Óscar, Carlos Amores y Carlos Arroyo, los tres grandes competidores madrileños.
“Me gustaría llevar al yudo de Madrid al sitio que le corresponde, al sitio que merece ocupar dentro del panorama nacional e internacional. Lo único que pretendo es ayudar a los deportistas madrileños y, por ende, al yudo”. Compagina esta labor con el trabajo de tutor-consultor en el PROAD o Programa de atención al deportista de alto nivel, dentro del CSD. Asegura que “es una labor también muy gratificante y muy necesaria, ahora mismo es del todo muy desaconsejable que un deportista no se labre un futuro aparte del deporte”.
No quiere ser seleccionador portugués
Es todo un icono dentro y fuera de nuestras fronteras, un gran referente. Como deportista posee unas excelentes cualidades basadas en la cultura del esfuerzo y el sacrificio. Ha sido muy receptivo con las novedades y el desarrollo que ha sufrido el deporte. Peñas es, sobre todo, un experto en la alta competición que acaba de rechazar una oferta para cubrir el puesto de seleccionador del equipo absoluto de Portugal.
Este madrileño siempre ha ido por delante de su tiempo en un deporte con una estructura muy conservadora y tradicional. Ha sabido implantar los nuevos métodos de entrenamiento y la mejor prueba de ello son los resultados que conforman su abultado palmarés. Ha observado a los mejores, se ha formado con ellos y siempre ha estado dispuesto a compartir toda esa fuente de conocimientos.
Para la historia deja la categoría de -66 Kg. con inolvidables duelos y finales de antología con Roberto Cueto, Kenyi Uematsu y Carlos Montero. “Hemos hecho grandes combates sí. Kenyi ha sido un gran rival desde luego pero es en el circuito internacional donde hay que despuntar y preocuparse por batir a los rivales si se quiere estar al más alto nivel”, reconoce Peñas. En cuanto al futuro de esta categoría el madrileño está tranquilo y lo ve claro: “Es el turno de Sugoi Uriarte que ya esta haciendo una gran temporada, y de David Ramírez. No hay que obstaculizar a los que vienen detrás pegando fuerte, es ley de vida”, concluyó. Todo un fuera de serie dentro y fuera del tatami.
“El yudo es uno de los deportes más completos, tanto para la mente como para el físico y además educa, posee unos valores que otros deportes no tienen, aquí no caben algunas maneras que se ven en futbol por ejemplo, es mi deporte, estoy muy orgulloso. El balance que hago de estos años es excelente, el yudo me ha dado muchísimas cosas y muy positivas, he disfrutado de la alta competición y ahora toca verlo desde el otro lado, la verdad que es que me gusta tanto que no he querido desvincularme del todo”, confiesa el yudoca.
“Me gustaría llevar al yudo de Madrid al sitio que le corresponde, al sitio que merece ocupar dentro del panorama nacional e internacional”, añadía.
Óscar Peñas actualmente es coordinador en la Federación Madrileña de Yudo; trabaja con las categorías base, es una de las buenas cosas que hizo la madrileña, incorporar en su estructura a gente con savia nueva como Óscar, Carlos Amores y Carlos Arroyo, los tres grandes competidores madrileños.
“Me gustaría llevar al yudo de Madrid al sitio que le corresponde, al sitio que merece ocupar dentro del panorama nacional e internacional. Lo único que pretendo es ayudar a los deportistas madrileños y, por ende, al yudo”. Compagina esta labor con el trabajo de tutor-consultor en el PROAD o Programa de atención al deportista de alto nivel, dentro del CSD. Asegura que “es una labor también muy gratificante y muy necesaria, ahora mismo es del todo muy desaconsejable que un deportista no se labre un futuro aparte del deporte”.
No quiere ser seleccionador portugués
Es todo un icono dentro y fuera de nuestras fronteras, un gran referente. Como deportista posee unas excelentes cualidades basadas en la cultura del esfuerzo y el sacrificio. Ha sido muy receptivo con las novedades y el desarrollo que ha sufrido el deporte. Peñas es, sobre todo, un experto en la alta competición que acaba de rechazar una oferta para cubrir el puesto de seleccionador del equipo absoluto de Portugal.
Este madrileño siempre ha ido por delante de su tiempo en un deporte con una estructura muy conservadora y tradicional. Ha sabido implantar los nuevos métodos de entrenamiento y la mejor prueba de ello son los resultados que conforman su abultado palmarés. Ha observado a los mejores, se ha formado con ellos y siempre ha estado dispuesto a compartir toda esa fuente de conocimientos.
Para la historia deja la categoría de -66 Kg. con inolvidables duelos y finales de antología con Roberto Cueto, Kenyi Uematsu y Carlos Montero. “Hemos hecho grandes combates sí. Kenyi ha sido un gran rival desde luego pero es en el circuito internacional donde hay que despuntar y preocuparse por batir a los rivales si se quiere estar al más alto nivel”, reconoce Peñas. En cuanto al futuro de esta categoría el madrileño está tranquilo y lo ve claro: “Es el turno de Sugoi Uriarte que ya esta haciendo una gran temporada, y de David Ramírez. No hay que obstaculizar a los que vienen detrás pegando fuerte, es ley de vida”, concluyó. Todo un fuera de serie dentro y fuera del tatami.
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